miércoles, 10 de septiembre de 2025

 

“LO SÓLIDO SE DESVANECE: LA INCAPACIDAD DEL FMLN DE LEER LA REALIDAD CAMBIANTE”.

POR: MSc. JOSÉ ISRAEL VENTURA.

INTRODUCCIÓN

Desde los primeros años de formación universitaria, uno de los aprendizajes más significativos fue la idea de que nada permanece estático: todo fluye, todo cambia, nada queda donde está ni permanece como es. Esta noción, heredada de los presocráticos como Heráclito y reafirmada posteriormente en la dialéctica de Hegel y Marx, se convirtió en un lente fundamental para interpretar la realidad.

La frase atribuida a Heráclito, “Nadie se baña dos veces en el mismo río”, sintetiza la idea de que la vida es movimiento y transformación permanente. En este sentido, la sociología, la filosofía y la lógica aprendidas en la universidad no eran simples materias para aprobar, sino llaves para abrir la comprensión crítica del mundo.

Sin embargo, esa riqueza conceptual parece haberse estancado en algunos sectores de la sociedad salvadoreña, particularmente en quienes, atrapados en las categorías de los años ochenta, se resisten a aceptar que los paradigmas del pasado ya no ofrecen respuestas adecuadas al presente.

La experiencia personal de reencontrarme con un antiguo compañero universitario, ferviente seguidor del FMLN, me dejó claro este fenómeno. A pesar de que repetía con fluidez los conceptos aprendidos, lo hacía como un disco rayado, sin lograr recontextualizarlos ni aplicarlos a la dinámica de un mundo transformado por la globalización, las tecnologías digitales, la economía del conocimiento y la emergencia de nuevas subjetividades sociales.

Escuchar su discurso fue como viajar en el tiempo a la década de la guerra civil, donde se hablaba de lucha de clases en términos rígidos, de “pueblo” y “burguesía” como categorías absolutas, sin matices ni actualización. Esa experiencia me condujo a una conclusión que puede parecer dura, pero es bastante certera: allí radica una de las causas principales de la obsolescencia del FMLN. El partido continúa interpretando la realidad con las mismas categorías caducas de los ochenta, sin notar que la sociedad salvadoreña ha cambiado radicalmente en las últimas décadas. La historia avanza, pero el FMLN sigue atrapado en un marxismo oxidado, incapaz de renovarse ni de leer los nuevos lenguajes sociales.

Este ensayo busca demostrar que la obsolescencia ideológica del FMLN no es un accidente, sino el resultado de una negativa a actualizar su marco conceptual y ético. Para ello, se analizará la dialéctica del cambio como fundamento filosófico, se examinará la diferencia entre repetir contenidos y comprender críticamente, se explorará el caso del FMLN como ejemplo de rigidez ideológica y se discutirá cómo la sociología de la educación y la ética pueden aportar claves para superar el estancamiento. Finalmente, se propondrá la necesidad de un pensamiento crítico renovador, capaz de interpretar la realidad cambiante de El Salvador y de América Latina.

LA DIALÉCTICA DEL CAMBIO: NADA PERMANECE IGUAL

Heráclito afirmaba que “todo fluye” (panta rhei). Para él, la realidad era un constante devenir y no una sustancia fija. Esta intuición primigenia fue retomada siglos más tarde por Hegel, quien la sistematizó en la dialéctica como método de pensamiento. Marx y Engels, a su vez, transformaron esa dialéctica idealista en una dialéctica materialista, afirmando que la historia es el resultado de contradicciones en movimiento.

En la modernidad tardía, pensadores como Zygmunt Bauman (2003) han recordado esta misma lección con nuevas metáforas: lo sólido se desvanece en el aire, lo que parecía firme se diluye en una modernidad líquida donde las instituciones, los valores y las certezas se transforman aceleradamente.

Aplicar esta perspectiva a El Salvador implica reconocer que los marcos teóricos que explicaron los conflictos de los años 80 no necesariamente explican los del 2025. Las luchas sociales han mutado: antes era la tierra contra el latifundio; ahora es el acceso a la tecnología, la precariedad laboral en la economía de plataformas, la migración masiva y la dependencia digital. Quien pretenda leer el presente con las categorías de hace cuatro décadas, inevitablemente quedará atrapado en la obsolescencia.

REPETICIÓN VS. COMPRENSIÓN CRÍTICA

Repetir un contenido es fácil; comprenderlo y aplicarlo críticamente es un desafío mayor. La experiencia relatada con mi compañero universitario ilustra esta diferencia.

 Él podía recitar de memoria conceptos de filosofía, lógica y dialéctica, pero lo hacía sin reinterpretarlos en el marco de la realidad contemporánea.

Paulo Freire (1970) llamó a este fenómeno “educación bancaria”: aquella en la que el educando se limita a recibir depósitos de información que luego repite mecánicamente. Frente a ella, Freire defendió la “educación problematizadora”, donde el conocimiento se construye en diálogo con la realidad cambiante.

La obsolescencia ideológica aparece cuando la repetición sustituye a la comprensión crítica. El marxismo, concebido originalmente como una herramienta dinámica de análisis histórico, se transforma en dogma rígido. Lo que debía ser brújula se convierte en ancla que impide avanzar.

EL FMLN Y LA OBSOLESCENCIA POLÍTICA

El Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional fue, en su origen, una expresión de resistencia popular frente a la dictadura militar y la desigualdad social. Su tránsito de guerrilla a partido político en los años 90 generó esperanzas de transformación democrática. Sin embargo, una vez en el poder, el FMLN mostró incapacidad para renovarse ideológicamente.

En vez de leer los nuevos desafíos de la globalización, del neoliberalismo y de la revolución tecnológica, el partido continuó con el mismo discurso de lucha de clases y antiimperialismo que utilizaba en los años 80. Sus consignas sonaban cada vez más desconectadas de la vida cotidiana de una juventud que ya no se identifica con esas categorías.

Las derrotas electorales de 2019 y 2021, donde el FMLN prácticamente desapareció como fuerza relevante, son el resultado visible de esa obsolescencia. Persistir en un marxismo oxidado y en consignas anacrónicas lo condenó a la irrelevancia. No supo construir un proyecto renovador ni éticamente coherente.

SOCIOLOGÍA DE LA EDUCACIÓN Y ÉTICA EN CONTEXTO

La sociología de la educación enseña que la escuela y la universidad también pueden volverse obsoletas si no se actualizan. Cuando los contenidos educativos se repiten sin conexión con la realidad, producen generaciones incapaces de transformar su entorno.

Del mismo modo, la política necesita una actualización permanente. La ética exige honestidad intelectual para reconocer que los paradigmas caducan. No es traición superar el dogma, sino responsabilidad ética. Como afirmaba Kant (1785/2002), la dignidad humana consiste en tratar al ser humano como fin y no como medio. Repetir consignas caducas convierte a las personas en simples instrumentos de ideologías muertas.

CONCLUSIÓN

La obsolescencia ideológica es consecuencia de la rigidez. El FMLN, atrapado en categorías de los años 80, se convirtió en un fósil político incapaz de dialogar con el presente. La experiencia de escuchar a un compañero repetir discursos caducos confirma este diagnóstico: la repetición no transforma, la comprensión crítica sí.

El cambio es la única constante. Lo supieron Heráclito, Marx y Bauman. Quien no lo entienda está condenado a desaparecer. La educación y la política deben actualizarse si quieren tener relevancia.

REFLEXIÓN FINAL

La lección es personal y colectiva. En lo personal, comprendí que escuchar sin interrumpir me permitió descubrir las raíces de la obsolescencia. En lo colectivo, comprendí que un país no puede vivir de consignas congeladas. El desafío es educar para la crítica, la actualización y la ética.

La política salvadoreña necesita nuevos lentes. La educación debe preparar ciudadanos capaces de reinterpretar su mundo. Solo así se romperá el ciclo de obsolescencia y se abrirán caminos de transformación.

 

 

SAN SALVADOR, 9 DE SEPTIEMBRE DE 2025

 

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS.

1.      Bauman, Z. (2003). Modernidad líquida. Fondo de Cultura Económica.

2.      Freire, P. (1970). Pedagogía del oprimido. Siglo XXI.

3.      Heráclito. (1996). Fragmentos. Gredos.

4.      Kant, I. (2002). Fundamentación de la metafísica de las costumbres (1785). Alianza.

5.      Kosík, K. (1967). Dialéctica de lo concreto. Grijalbo.

6.      Marx, K., & Engels, F. (1848/2001). Manifiesto del Partido Comunista. Alianza Editorial.

7.      Ventura Martínez, J. I. (2025). Reflexiones sobre educación y política en El Salvador.

 

 

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