SAN SALVADOR, 31
DE JULIO DE 2025
DÍA DEL PERIODISTA
EN EL SALVADOR
A LOS PERIODISTAS ÍNTEGROS, VALIENTES Y CON ÉTICA
En este día
dedicado al periodismo salvadoreño, no podemos simplemente celebrar; debemos
también reflexionar, reconocer y denunciar. En una época de confusión
informativa, donde abundan los operadores disfrazados de comunicadores, es
imprescindible separar la paja del trigo: rendimos homenaje a los periodistas
auténticos y, al mismo tiempo, condenamos con firmeza a quienes han degradado
la noble misión de informar.
Ustedes,
periodistas honestos, son faros de dignidad en medio del lodo mediático. Enfrentan amenazas, marginación y escasez de recursos, pero no ceden. Siguen de
pie, con la pluma como lanza, la verdad como escudo y el pueblo como razón de
ser. En un contexto donde abundan las voces serviles, ustedes representan la
conciencia crítica que se niega a arrodillarse. Su lucha por la verdad no solo
es un servicio, es una forma de resistencia y un acto revolucionario.
Pero no podemos
callar ante los traidores del oficio. Aquellos que han convertido la
comunicación en mercancía, que manipulan datos, tergiversan hechos, fabrican
escándalos y actúan como mercenarios al servicio de intereses políticos,
económicos o ideológicos ajenos al bien común. Medios como La Prensa Gráfica,
Diario de Hoy, El Faro, Factum, Foco, Gato Encerrado, YSUCA y otros similares,
lejos de informar, intoxican la conciencia colectiva. No ejercen periodismo,
ejercen manipulación sistemática. No buscan la verdad, la distorsionan.
Hipócritas de la
pluma y el micrófono, que hoy se envuelven en el discurso de la libertad de
prensa, pero ayer callaron ante la corrupción de gobiernos anteriores, cuando
los sobresueldos, los pactos con pandillas y la represión eran la norma. Se
llenan la boca hablando de democracia, pero nunca defendieron al pueblo
empobrecido ni al periodista de barrio. Hoy se presentan como mártires, pero
son cómplices de un sistema podrido que colapsó.
A los verdaderos
periodistas, ¡gracias! Porque su trabajo no se mide por aplausos ni premios,
sino por la incomodidad que generan en los corruptos. Porque su voz no se alquila
ni se vende. Porque su compromiso está con el pueblo, no con las fundaciones
extranjeras, embajadas, partidos reciclados ni organizaciones que viven de
simular democracia.
Ustedes dignifican
el oficio. Son cronistas de la realidad sin maquillaje, denunciantes del poder
sin miedo, guardianes de la verdad sin concesiones. El pueblo los ve, los
respeta y los necesita. Y cuando los mercenarios del periodismo caigan en el
olvido, ustedes permanecerán en la memoria como ejemplo de integridad.
Que esta carta sirva
como homenaje, como respaldo moral y como grito de denuncia. Porque el
periodismo, cuando no sirve a la verdad, se convierte en cómplice de la
mentira.
¡Gracias por no
venderse!
¡Gracias por
resistir!
¡Gracias por
dignificar el periodismo salvadoreño!
Con respeto,
admiración y compromiso,
MSc. José Israel
Ventura
Educador,
investigador y ciudadano comprometido con la verdad
No hay comentarios:
Publicar un comentario