¿QUIÉN
GANA Y QUIEN PIERDE CON LA PANDEMIA DEL CORONAVIRUS?
POR: MSc. JOSÉ ISRAEL VENTURA
En las guerras,
las pandemias, los huracanes y en los
terremotos siempre hay unos que salen
ganando y otros que salen perdiendo.
Históricamente siempre son los mismos los que salen perdiendo. La clase
asalariada. Es decir, aquellos que sólo tienen su pellejo que vender.
Una situación se
produce si nos referimos a los países, en la que encontramos unos ricos y otros pobres, unos desarrollados y otros subdesarrollados. Dentro de estos
grupos de países unos saldrán fortalecidos
y otros debilitados. Los países
desarrollados pondrán a prueba su arsenal tecnológico (China, Corea del Sur y
Estados Unidos) pues la pandemia será una gran oportunidad para calibrar y
ajustar sus adelantos tecnológicos y herramientas digitales como cámaras de
vigilancia, reconocimiento facial, medición
de temperaturas y aplicación de monitoreo GPS entre otros.
De modo que, la
crisis generada por la pandemia del
coronavirus será una gran oportunidad pare poner en práctica todo tipo de
adelantos tecnológicos que en tiempos normales no lo pueden hacer. No obstante,
el problema no radica en que se prueben los últimos adelantos tecnológicos, la
cuestión es que más tarde que nunca esos
adelantos servirán para ejercer un mayor control sobre las grandes mayorías poblacionales del mundo.
De ahí que este tipo de fenómenos (Covid 19) no es casual ni mucho menos un fenómeno
sobrenatural, sino parte de la estrategia
del poder hegemónico mundial al cual las
superpotencias le sacan el máximo provecho económico, político, científico y tecnológico. Además, que les permite hacer
un diagnóstico de la facilidad con que se puede manipular, generar miedo e inmovilizar a la población mundial.
En esto los chinos y los coreanos no pierden
tiempo porque entienden que esta es una excelente oportunidad para probar todo
su poderío tecnológico digital y estar
preparados para competir con otras potencias económicas como estados Unidos que
hoy sigue siendo la potencia hegemónica que ejerce gran influencia sobre los
países que son sus aliados pese a sus contradicciones internas y la galopante deuda externa que mantiene en
donde su mayor acreedor es China.
Pero hay otro sector
que saldrá beneficiado con la pandemia
y es el sector de las industrias farmacéuticas y empresas de productos de higiene.
Los fabricantes de mascarillas, alcohol gel,
guantes, jeringas, aparatos electrónicos, medicamentes antivirales, aparatos
respiratorios entre otros. ¿Quiénes saldrán más
beneficiados con el coronavirus?
Obviamente la Industria Farmacéutica y los grandes consorcios de
laboratorios mundiales que ya de por sí acumulan grandes sumas de
dinero y bienes en su haber.
Empero, en el
otro extremo están los países pobres, atrasados
que mantienen una férrea lucha por la supervivencia de sus habitantes que únicamente logran vivir
el día a día. Estos países que no sólo padecen el flagelo de la pobreza, el hambre y la miseria sino que además, padecen una
injusta distribución de la riqueza y una
galopante corrupción en la que gran parte de sus recursos van a parar a manos
de funcionarios inmorales y corruptos
que velan nada más por sus
intereses mezquinos y que han instalado
desde hace muchos años en el país una
corruptocracia a su medida.
En este contexto
el actual gobierno se ve confrontado con
partidos políticos y funcionarios que
históricamente han vivido en una
“mancebía política” defendiendo nada más los intereses de un minúsculo grupo de
oligarcas que impiden cualquier proceso de transformación.
En consecuencia,
estas condiciones de injusticia que se han venido reproduciendo históricamente
son las que generan pobreza, hambre, miseria
e ignorancia; circulo vicioso que se reproduce generación tras generación.
Para sobrellevar
la situación antes descrita el actual
gobierno tiene que continuar la misma
dinámica de endeudamiento con los
organismos internacionales (FMI, BM Y BID entre otros) situación que ha sido duramente criticada por algunos
partidos políticos como (ARENA Y FMLN); pero que durante sus gestiones como gobierno dejaron al país
con una deuda de alrededor de 18,372.72 que representa el 74.1% del PIB y que fueron en la última gestión de
ARENA y las dos gestiones del FMLN en la que la deuda
sufrió un considerable aumento. (El
Diario de Hoy, Artículo (2017). Infografía: La deuda de El Salvador se triplicó
en los últimos 15 años.)
Obviamente la
deuda la pagan los gobiernos pero con dinero
que recaudan de la población. Sin
embargo, el problema no radica ahí, sí estos préstamos se invirtieran en la
población para mejorar las condiciones materiales de vida. El gran problema de
los gobiernos pasados es que ha servido
para hacer más millonarios a la oligarquía salvadoreña, a los funcionarios
corruptos e inmorales que históricamente
siempre han negociado prestamos con los “los
maletines negros”.
¿Quién pagará el
alto costo de la pandemia del
coronavirus? desde luego será la clase
trabajadora, la clase asalariada, la clase carente de los medios de producción.
Es inevitable que después de que se haya superado la pandemia del coronavirus
viene lo que desde ya están anunciando algunos medios internacionales, una
recesión económica lo que traería más pobreza, desempleo, hambre, miseria e más inequidad, para los sectores más pobres
del mundo y sobretodo de los países atrasados como el nuestro.
En esta ocasión
es cierto el presidente se está endeudando pero por una causa justificada que
tiene como finalidad salvar vidas y no
para engordar a funcionarios ni algunos miembros de
empresa privada.
Pero como
decía el gran escritor Eduardo Galeano:
“ el problema de la deuda externa del
Tercer mundo, las victimas: cuanto más pagan, más deben; cuanto más reciben,
menos tienen; cuanto más venden, menos cobran; Necesitan cada vez más
horas de trabajo, para ganar cada vez
menos. Necesitan Cada vez más productos propios, para recibir cada vez menos
productos ajenos”
Este es sin
lugar a dudas el círculo vicioso del cual no estoy seguro si un día podrán
salir los países del tercer mundo.
San
Salvador, 30 de marzo de 2020.
No hay comentarios:
Publicar un comentario