viernes, 5 de enero de 2018

DE LA CULTURA DEL ENVASE A LA CULTURA DEL CONTENIDO. POR: MSc. JOSÉ ISRAEL VENTURA.


DE LA CULTURA DEL ENVASE A LA CULTURA DEL CONTENIDO.
POR: MSc. JOSÉ ISRAEL VENTURA.
En la concepción materialista dialéctica  hay dos categorías  que son de mucha importancia para el análisis de cualquier fenómeno ya sea natural o social. Estas son: Contenido y forma.  Como ya se ha expresado ambas categoría son de vital importancia para profundizar en el conocimiento de la realidad. De modo que,  sí sólo abordamos el fenómeno por su forma el análisis resultará sesgado o dicho en otras palabras superficial. De  ahí que se hace necesario siempre  se tome en cuenta ambas categorías.
Pero ¿Cuál es el fenómeno  que se observa en esta sociedad que se le ha dado en llamar  sociedad del conocimiento?  Lo que se puede palpar es como lo expresaba el gran escritor Uruguayo  Eduardo Galeano: “Vivimos en un mundo donde el funeral importa más que el muerto, la boda más que el amor y el físico más que el intelecto. Vivimos en la cultura del envase, que desprecia el contenido.”  Pero lo paradójico de todo esto es que la gente sigue creyendo que bajo la sociedad capitalista la cultura se ha enriquecido pero es lo contrario, la cultura cada vez se está empobreciendo, los jóvenes tienen mucha información sobre muchos aspectos de la vida, sin embargo, no logran comprender el verdadero significado   de los conceptos que repiten, los medios de información  son los mayores propagadores de esa pseudo cultura ¿A dónde está el error? sencillamente todos vemos como los adelantos, científicos, técnicos y tecnológicos se han desarrollado, de eso no hay ninguna discusión  lo vivimos todos los días, nadie duda de los adelantos de la medicina, la ingeniería genética, la biotecnología, la física y la química, la cibernética, los viajes espaciales, etc., sin embargo, todo este desarrollo es cultura material. No obstante, con todo lo que puede tener de beneficioso para la humanidad todo eso ha traído  consecuencias graves para la especie humana en tanto, nos está arrastrando a un atraso en el desarrollo espiritual, es decir, pues el hombre cada día nos conocemos menos, seguimos tratando a los hombres como seres desconocidos; las estructuras de injusticia que padece el mundo le siguen negando el pleno desarrollo de sus capacidades éticas, morales e intelectuales.
Vivimos en la cultura light, del envase, que desprecia el contenido de las cosas. El ya muy famoso término light, significa ligero, donde la profundidad y esencia de las cosas ya no importan, sólo importa lo superficial, lo ligero, lo desechable. O dicho también en palabras de Galeano, vivimos la cultura del desecho.
Las generaciones  actuales cada vez se van acostumbrando a vivir la cultura del facilismo, de lo rápido, de lo inmediato, buscan la  fácil   y ligero.  Porque la sociedad capitalista les vende la ilusión  de que las cosas, los proyectos son fáciles y que se pueden lograr con el mínimo esfuerzo. La tecnología pone en sus manos rápidas respuestas,  el investigar, analizar y sacar sus propias conclusiones, es algo para lo que no tienen ni la intención ni el tiempo esta cultura.
Esta cultura hace creer a los jóvenes que se puede vivir con el mínimo esfuerzo.  Pero ¿Cuál es la consecuencia inmediata de este fenómeno?  Sin lugar a dudas la mayor parte de los jóvenes  no poseen ningún criterio sólido fundamentado, a la hora de emitir sus opiniones en torno a cualquier fenómeno que se suscite en su realidad.
 Los jóvenes lo que están haciendo es  un “refrito” de la cultura creada por otras generaciones. Este fenómeno se puede observar también en casi todos los medios, escritos, radiales, tv e internet. En la que la mayoría se los medios se concretan a repetir frases hechas con lo cual se empobrece más  la cultura  y proyectan su miseria humana.
Obviamente estos medios y sus animadores muestran a través de sus programas un visceralismo descomunal por ejemplo, programas de entretenimiento como los que pasan los canales Mexicanos, (TV AZTECA, UNIVISIÓN ENTRE OTROS)  TCS y otros del país que no tienen en absoluto  ningún  contenido educativo para la población. Pues a ellos lo único que les interesa es estar posicionados en el mejor Rankin de audiencia y además, obtener la mayor cuota de ganancia.
Definitivamente no se está en contra del desarrollo tecnológico, lo que se está en contra es la domesticación que ejercen sobre la población sobre todo aquella masa poblacional menos informada. Lamentablemente,  ellos  (MC) que deberían ser  un eficaz instrumento para contribuir a la educación de la sociedad son los primeros que distorsionan y deforman la realidad.
Por otro lado, se tiene un sistema educativo informativo que no coadyuva al desarrollo del pensamiento lógico racional de los estudiantes; pero esta  situación se continúa reproduciendo en la Universidad en la que al estudiante se le informa  pero no se le forma.
Los jóvenes y muchos adultos viven  una vida light, el ser humano se ha vuelto liviano, quiere vivir y gozar la vida aquí y ahora, sin consistencia ni compromisos, sin deberes, pero sí exigiendo   todos sus derechos, no para asumir mayores responsabilidades, sino para poder disfrutar y gozar con menos limitaciones.
Pero ¿Cuál es la causa de este peligroso fenómeno? sin lugar a dudas vivimos en una sociedad en la que todo lo que gira en su entorno se convierte en mercancía. La  educación se ha mercantilizado de tal manera, que lo que importa  es la fachada, la apariencia, o parafraseando a Eduardo Galeano, el féretro es más importante que el muerto, la misa más importante que Dios. Está claro el sistema ha hecho  un vaciamiento de cerebros, que es lo que le interesa aquellas élites  que  ostentan  el poder político, económico e ideológico del país.




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